Hoy he hecho caso a mi horóscopo que me decía que tenía que estudiar y he decidido arrancarme. Llevaba un rato escribiendo y me ha empezado a doler la espalda y en un arrebato de deformación profesional he intentado buscar el problema para encontrar la solución, pero el problema salta a la vista en la foto. Soy pequeña, pero no soy capaz de encogerme tanto como para caber ahí...
La foto es un poco caótica, así que os voy a contar un poco lo que tengo por ahí:
- El cable que cuelga a la izquierda es el de la tele que está casi en el techo.
- Lo de debajo es mi CPU aguantando el teclado y el ratón, con alfombrilla y todo.
- Lo de la pizarra es una gracia de mi cuñao que es muy salao él.
- Lo de debajo que sobresale es el antiguo cristal de la mesa del salón...
- Encima del escritorio: apuntes, bolis, un atril, mi lámpara tuneada, agua del mes pasado, feldene, crema de manos, un bote con incienso, un bote de clips, la cesta de los bolis, una linterna escondida, una vela, un calendario, la caja de mi reloj, el abono, una impresora de hace 10 años y hasta un billete del metro de Bilbao... así cómo voy a tener sitio para nada...
- Lo que se ve al lado del cajón abierto son más apuntes sobre el escáner que no funciona que está a su vez sobre un zapatero...
- Para lo de las cortinas de lacitos... no tengo explicación... estaban ahí cuando llegué...
A todo esto, tengo que mover la antigua cama de mi hemana (también conocida como mi cama de verano) que está frente al escritorio para poder poner la silla y mover la CPU a un lado para tener un sitio donde poner las piernas...
En este plan, ¿no os daría una pereza tremenda estudiar? pues eso...
1 comment
Si es que entre el poco espacio de la habitación y el desorden que tu añades, parece algo un poco caótico.
Pero doy fé de que ahí se puede estudiar.
Tú tienes más sitio que yo (recuerda la pantalla de ordenador que teníamos anteriormente).
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Pues nada, que si eso nos puedes contar algo aquí, que siempre se agradece..